Resumen
Las deficiencias o limitaciones de la familia hacen que el Estado tenga que asumir el cuidado, orientación y educación de los niños abandonados, en situación de peligro o que han cometido acciones delictivas. En muchos casos, la misma estructura social imposibilita que la mayoría de la población pueda dar una debida atención a la infancia, lo que supone una grave contradicción social. Por otro lado, los sistemas institucionales que históricamente han cuidado de la infancia han cumplido una función de aislamiento más que de educación o "reeducación". En El Salvador, la protección de menores en situación irregular se encuentra sometida al Código de Menores y a la jurisdicción de tribunales especiales, y se cuenta con un centro de observación, un centro de orientación y dos centros de readaptación. La historia, organización y funcionamiento del Centro de Orientación Rosa Virginia Pelletier muestra cómo las estructuras institucionales pueden contradecir de hecho los objetivos formales y las intenciones personales. La normatividad informal exige al personal de ese Centro una función de vigilancia y a las internas un papel de reclusas, lo que puede terminar convirtiendo socialmente a las niñas en verdaderas "delincuentes". Al final del estudio se sugieren algunas medidas concretas que pueden ayudar a superar esta situación, aunque un cambio más a fondo no parezca posible en las presentes condiciones sociopolíticas.
ECA Estudios Centroamericanos, Vol. 37, No. 401, 1982 : 179-192.
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