Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
61
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
ENSAYO
Acercamiento a los espacios de
debate en la cobertura de la prensa
escrita sobre la Universidad de El
Salvador, durante el mes de julio de
1972.
An approach to the spaces of
debate in the Press of University of El
Salvador, during July 1972.
Alexis Alfredo Mejía Salazar
Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas”
El Salvador
alexis.mejia140889@gmail.com
Resumen: El 19 de julio de 1972, el Presidente Arturo Armando Molina
anunció, en cadena nacional de radio y televisión, que la Universidad de El
Salvador había sido ocupada por cuerpos de seguridad pública, en un intento
por frenar al “fantasma comunista” que se fortalecía en su interior. En el referido
discurso, Molina mencionó reiteradamente a los medios de comunicación, cuya
cobertura periodística sirvió de base para construir los argumentos sobre los
cuales cali caba al con icto interno entre la Facultad de Medicina y el Consejo
Superior Universitario como un asunto de seguridad nacional”. De esta manera,
los medios de comunicación se alinearon con el discurso político, marcadamente
anticomunista, mediante el cual se debatió el rol político de la universidad, los
alcances y limitaciones de la autonomía universitaria concedida en la década de
los cuarentas, y un revisionismo de los gobiernos militares de Osorio y Lemus,
en la década de los cincuenta, a quienes se responsabilizó abiertamente por el
“problema” que representaba la UES para la estabilidad del status quo nacional
defendido por el estamento militar.
Palabras clave: Anticomunismo, Universidad de El Salvador, Seguridad
Nacional, Autonomía Universitaria, Militarismo, Prensa escrita.
Abstract: On July 19th, 1972, President Arturo Armando Molina made a
speech, through national TV & radio broadcast, announcing that the University of
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita
sobre la Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
No. 158, Julio-Diciembre de 2021, 61-96
DOI: https://doi.org/10.51378/realidad.v0i158.6431
Recibido: 11/08/2021 Aceptado: 11/10/2021
Alexis Alfredo Mejía Salazar62
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
El Salvador was occupied by public security forces, trying to stop the Communist
phantom” who was growing inside of it. President Molina mentioned repeatedly
the national media reports to afrm that the inner conict between the Faculty
of Medicine and University authorities was a “national security matter”. The
Salvadoran media were aligned with political speech, very anti-comunnist, to
make a narrative, used to debate the political role played by the University;
objectives and limitations of the autonomy granted on the 1950 Constitution,
and historical revisionism of Osorio and Lemus’s military governments, whom
were responsabilized by the “hazard” who University represented for national
status quo defended by military forces.
Key words: Anti-communism, University of El Salvador, National Security,
Autonomy, Militarism, Narrative, Media.
1. Introducción
El 19 de julio de 1972, cumplidos
diecinueve días tras su toma de pose-
sión, el Presidente Arturo Armando
Molina pronunció un discurso en
cadena nacional de radio y televi-
sión, haciendo una revisión breve,
pero exhaustiva, de los aconteci-
mientos que llevaron a la interven-
ción al campus de la Universidad de
El Salvador, en horas del mediodía,
posicionándolo como un asunto de
seguridad nacional” que requirió la
pronta atención de los cuerpos de
seguridad pública:
La Universidad Nacional, que ha caído en manos del Partido
Comunista de El Salvador y de otro reducido grupo de oportu-
nistas de la más denigrante inmoralidad, ha llevado sus métodos
de represión y terror a un grado tal que ha motivado la reacción
indignada de todos los profesionales decentes, que son casi la
totalidad, y de los propios estudiantes universitarios, quienes,
como lo hemos visto en estos días a través de la prensa, han
tenido la valentía de arriesgar su integridad física y su carrera
profesional antes de plegarse a la camarilla corrompida y anti-
patriota de los dirigentes (Molina, en El Diario de Hoy, 20 de
julio de 1972, p.11).
El grupo de profesionales
decentes” y los estudiantes univer-
sitarios a los que hace referencia,
corresponden a aquellas asocia-
ciones y grupos que sostuvieron
muchas reuniones y cabildeos con
las asociaciones médicas, gremios
profesionales anes y la élite polí-
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
63
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
tica de la época, en búsqueda de
apoyos para el entonces Decano
de la Facultad de Medicina de la
UES, doctor Pedro Ramón Urquilla,
quien había sido destituido por la
Asamblea General Universitaria
durante la noche del 5 de julio del
mismo año, debido a su negativa
a aplicar la “Política de Puertas
Abiertas” del entonces Rector de la
Universidad, Rafael Menjivar, como
una medida que buscaba atender
al mayor número de estudiantes
graduados del bachillerato, que en
aquel entonces debían pasar por
un examen de admisión previo a su
ingreso.
Sin embargo, Molina consideraba
que las autoridades universitarias
tenían nes más perversos”, apro-
vechando los benecios de la reco-
nocida autonomía universitaria y el
creciente presupuesto universitario
para cumplir con sus objetivos inter-
nacionales”, a través de la destruc-
ción de la institucionalidad salvado-
reña, representada por el status quo
instaurado por los militares:
Para todo ello, la camarilla universitaria ha querido falsear, deli-
beradamente, el concepto de la autonomía, tratando de convertir
a la universidad en un Estado dentro de otro Estado. Lo que
atenta contra los principios más elementales de la soberanía
nacional, con el objeto de realizar impunemente sus maquina-
ciones contra el sistema institucional y a n de que no fuesen
descubiertas sus deshonestidades administrativas (Molina, en El
Diario de Hoy, 20 de julio de 1972, p. 11).
Estos acontecimientos, como
reiteradamente lo menciona Molina
en su discurso, formaron parte de
la extensa cobertura mediática que
realizaron los principales medios de
prensa escrita del país, de un conicto
interno universitario entre las autori-
dades de la Facultad de Medicina y
el Consejo Superior Universitario, el
cual fue presentado a través de una
narrativa mediática de tres actos, en
la cual se posicionó al Presidente
Molina como el “héroe” que salvó al
país del “fantasma comunista” que
crecía dentro de la Universidad de
El Salvador, y que tuvo como una
de sus últimas víctimas, al Decano
de la Facultad de Medicina y las
asociaciones estudiantiles anes a
su gura.
De esta manera, y de acuerdo
con los roles a cumplir por las élites
mediáticas dentro del sistema de
comunicación política de Blumler
y Gurevitch (1995), la élite mediá-
tica salvadoreña se alineó con el
marcado discurso anticomunista del
gobierno de Molina, contribuyendo
a fortalecer su imagen, y forzando
a una polarización de la opinión
pública, en el marco de un contexto
Alexis Alfredo Mejía Salazar64
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
internacional condicionado por el
desarrollo de la Guerra Fría.
Esta narrativa mediática cons-
truida por los medios de prensa
escrita, reeja unos espacios discur-
sivos profundos, en los cuales se
discute el rol que debe cumplir la
universidad en el contexto nacional
característico de la segunda mitad
del Siglo XX, y el papel decisivo de
la élite militar en el devenir histó-
rico nacional, teniendo el anticomu-
nismo como telón de fondo en todo
el debate.
Este artículo busca realizar una
breve revisión de estos espacios
discursivos en los cuales se desa-
rrolló esta cobertura mediática, para
comprender el contexto nacional que
marcó la evolución de los aconteci-
mientos alrededor de la intervención
militar al campus de la Universidad
de El Salvador, ocurrida el 19 de julio
de 1972, y el posicionamiento que
asumió cada uno de los personajes
que intervinieron en la sucesión de
los hechos
1
.
2. Desarrollo de los acontecimientos
En primer lugar, y a manera de
contexto, conviene realizar una breve
revisión de los acontecimientos
alrededor de la Universidad de El
Salvador, reconstruidos con base
en la cobertura mediática realizada
por los periódicos El Diario de Hoy y
La Prensa Gráca, y contrastada con
fuentes ociales del Gobierno de
El Salvador y la Universidad de El
Salvador, cuando fue posible:
Rafael Menjívar fue electo Rector
de la Universidad de El Salvador por
la Asamblea General Universitaria
(AGU) el 19 de febrero de 1971. La
elección de Menjívar tuvo lugar en el
contexto de una reforma introducida
a los Estatutos de la Universidad, que
permitía el voto nominal y público
para la elección de las autoridades
de la Universidad de El Salvador, en
lugar del voto secreto que se había
venido aplicando hasta entonces.
En ese contexto, la Federación de
Profesionales Académicos de El
Salvador, representados por Mario
Eduardo Avilés Pacas, José Adolfo
Ramírez Muñoz, Roberto Ortiz Ávalos,
Roberto Adrián Ávalos, Manuel
Antonio Moreno, René Vaquerano,
Alfonso Castro, Luis Alfredo Carvajal,
Carlos Eladio Alfaro Castillo, José
Elías Gómez Ávalos, Luis Antonio
Guzmán Meléndez y Fernando
Antonio María Escobar, presentaron
el 27 de febrero del mismo año, una
demanda de inconstitucionalidad
contra la reforma a los estatutos
universitarios, argumentando que
los mismos no fueron sometidos a
la aprobación del Poder Ejecutivo, ni
fueron publicados en el Diario Ocial
para conrmar su legalidad.
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
65
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Posteriormente, y en aras de
posibilitar la admisión de la máxima
cantidad posible de estudiantes en la
Universidad, el Rector Rafael Menjívar
promovió la denominada “Política de
Puertas Abiertas”, mediante la cual
se buscaba eliminar el examen de
admisión como requisito previo para
la admisión de estudiantes en las
diferentes facultades que compo-
nían la Universidad. Dicha iniciativa
fue aprobada en la sesión 589 del
Consejo Superior Universitario, cele-
brada el 10 de mayo de 1972, promo-
viendo su aplicación inmediata en el
proceso de admisión que se estaba
llevando a cabo en aquel momento.
La “Política de Puertas Abiertas”
contó con la oposición abierta de la
Facultad de Medicina, cuyo Decano,
el doctor Pedro Ramón Urquilla,
consideró que la medida perjudicaba
seriamente la calidad de los profesio-
nales médicos que estaban formando,
por tanto, se negó a permitir su apli-
cación inmediata, contando con el
apoyo de los miembros de la Junta
Directiva de la Facultad.
Por tanto, y ante las reiteradas
negativas del Decano Urquilla
por aplicar la “Política de Puertas
Abiertas”, el Consejo Superior
Universitario solicitó a la Asamblea
General Universitaria la destitución
del Decano y de la Junta Directiva de
la Facultad de Medicina, la cual fue
aprobada por dicho organismo en la
noche del 5 de julio de 1972.
El 7 de julio, las asociaciones
estudiantiles anes al decano desti-
tuido se reunieron en el edicio de
la Facultad de Medicina, conocido
popularmente como La Rotonda, y en
conjunto con un grupo de docentes
y personal administrativo anes,
rearmaron su apoyo a Pedro Ramón
Urquilla, y criticaron a la Asamblea
General Universitaria por haberse
apegado a los intereses del Rector
y el Consejo Superior Universitario.
A su vez, aprobaron que un grupo
de estudiantes buscara apoyos en
la Asamblea Legislativa y en los
gremios médicos a nivel nacional,
para explorar la factibilidad de
separar la Facultad de Medicina del
conjunto de la Universidad de El
Salvador.
En los días subsiguientes, la
cobertura mediática reejó las dife-
rentes reuniones sostenidas por los
representantes estudiantiles con
miembros de los gremios médicos a
nivel nacional, así como la recepción
de un grupo de estudiantes por dipu-
tados de la Asamblea Legislativa,
quienes aseguraron el apoyo al
Decano Urquilla, y reprochaban la
decisión tomada por la AGU. A su vez,
los periódicos recogieron numerosos
comunicados y pronunciamientos
entre el 8 y el 19 de julio de las
principales asociaciones médicas a
nivel nacional, solicitando a las auto-
ridades políticas del país tomar una
decisión que favoreciera a Urquilla y
sus grupos anes.
Alexis Alfredo Mejía Salazar66
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
El 11 de julio de 1972, una asam-
blea estudiantil aprobó la separa-
ción de la Facultad de Medicina
del conjunto de la Universidad de
El Salvador, nominándola “Dr. Luis
Edmundo Vásquez”, y solicitaron a
la Asamblea Legislativa el recono-
cimiento formal de dicha acción,
mediante un decreto que ocializara
su autonomía propia. La Escuela de
Medicina reinició labores el 18 del
mismo mes y año, en el edicio cono-
cido como La Rotonda, sin contar con
la autorización del Rector Menjívar ni
las autoridades centrales de la UES.
El 18 de julio de 1972, la
Corte Suprema de Justicia emitió
sentencia a favor de la demanda
de inconstitucionalidad presentada
por la Federación de Profesionales
Académicos de El Salvador, decla-
rando así ilegales las reformas
introducidas a los Estatutos de
la Universidad de El Salvador, las
cuales posibilitaron la elección
del Rector Menjívar y el Consejo
Superior Universitario que lo acuer-
paba (Diario Ocial, 18 de julio de
1972, pp. 6617-6625).
Al día siguiente, la Asamblea
Legislativa de El Salvador aprobó el
Decreto Legislativo No. 41, mediante
el cual derogó la Ley Orgánica de la
Universidad de El Salvador; desti-
tuyó a las autoridades electas de
la Universidad, así como todo el
personal que laboraba para la misma,
y autorizó al Poder Ejecutivo para
nombrar una comisión especial, con
el propósito de custodiar y adminis-
trar el patrimonio de la Universidad
de El Salvador, incluyendo sus fondos
líquidos, recibir fondos públicos,
efectuar erogaciones, y nombrar el
personal necesario para su funcio-
namiento, mientras se efectuara el
proceso de elección de las nuevas
autoridades, en el marco de la nueva
ley orgánica que fuera aprobada para
la Universidad (Diario Ocial, 19 de
julio de 1972, p. 6631).
El mismo día y hora en que se
estaba aprobando el decreto de desti-
tución de las autoridades universi-
tarias en la Asamblea Legislativa,
los cuerpos de seguridad del país,
en apoyo al Presidente Molina,
ingresaron a las instalaciones de
la Ciudad Universitaria y tomaron
bajo su custodia las instalaciones,
mientras procedían a la detención
del Rector Menjívar, el Secretario
General Sáenz Varela, y el Fiscal
General Arévalo, quienes se encon-
traban presentes en la sesión de la
Asamblea Legislativa celebrada en el
Palacio Nacional, para ser exiliados
tres días después a Nicaragua.
Durante la noche del 19 de julio,
el Presidente Molina pronunció un
discurso en cadena nacional de
radio y televisión, asegurando que
las decisiones tomadas fueron abso-
lutamente indispensables para la
seguridad interna del país (“Molina
analiza situación de Universidad
Nacional”, p. 28), pidiendo paciencia
y comprensión a todas las personas
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
67
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
afectadas por las decisiones tomadas,
incluida la población estudiantil, y
los padres de familia de los mismos.
Al día siguiente, el Presidente
Molina nombró a los miembros de
la Comisión Normalizadora de la
Universidad de El Salvador, entre-
gándoles la custodia de la Ciudad
Universitaria y todos los bienes recu-
perados. De esta manera, se inició el
arqueo a los fondos universitarios, y
la vericación de las instalaciones,
las cuales dieron respaldo a las
denuncias hechas por el Presidente
Molina en su discurso pronunciado
en cadena nacional, entre las que se
encontraba la impresión de panetos
propagandísticos, la existencia de
manuales y libros de tendencia
marxista, y el manejo discrecional
de los fondos universitarios, para
favorecer a los grupos anes a la
ideología comunista. Dicha postura
también fue apoyada por los medios
de prensa escrita, en el sentido que
los hallazgos en los arqueos a los
fondos universitarios y las instala-
ciones recibieron una importante
cobertura mediática por parte de
El Diario de Hoy y La Prensa Gráca,
entre el 21 y el 30 de julio, fortale-
ciendo así las denuncias hechas por
el Presidente Molina.
3. Caracterización de la secuencia narrativa
construida por cada uno de los periódicos
El resultado del trabajo de investi-
gación se basó en la revisión exhaus-
tiva de 139 publicaciones encon-
tradas en los periódicos El Diario de
Hoy y La Prensa Gráca, en los cuales
vale la pena establecer una diferen-
ciación entre los contextos intertex-
tuales particulares de cada uno de
los equipos editoriales, puesto que
dotaron a cada secuencia narrativa
de unos elementos diferenciadores,
los cuales, incidieron denitivamente
en la caracterización de los perso-
najes y las acciones que ocurrieron
alrededor de la Universidad de El
Salvador.
De esta manera, observamos un
discurso claramente anticomunista
que, oscila entre un anticomunismo
recalcitrante dirigido contra las auto-
ridades universitarias, por un lado, y
por el otro se observa un anticomu-
nismo más laxo, tendiente a criticar a
las organizaciones de izquierdas, por
haber aprovechado el principio de
autonomía universitaria para pose-
sionarse de la Universidad, pero sin
culpabilizar directamente a las auto-
ridades universitarias por ello.
Alexis Alfredo Mejía Salazar68
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
3.1 El Diario de Hoy: El eterno enemigo de la
Universidad
En la comparación entre ambos
periódicos, El Diario de Hoy realizó
la mayor cantidad de publicaciones
relacionadas con la Universidad de
El Salvador, con un total de 88 apari-
ciones en total, como se evidencia a
continuación:
Tabla 1.
Tipi cación de las publicaciones relacionadas con la Universidad de El Salvador, realizadas por
el periódico El Diario de Hoy, durante el mes de julio de 1972.
Tipo de publicación Frecuencia
Nota periodística 47
Artículos de opinión 19
Fotografía con pie descriptivo (sin nota
periodística vinculada)
12
Pronunciamientos 5
Caricaturas 5
TOTAL EDH 88
Fuente: Elaboración propia
Figura 1: Caricatura que representa a la Universidad en la gura
de un hombre, solicitando indicaciones al embajador ruso de Costa
Rica, tras la intervención a la universidad. Fuente: El Diario de
Hoy, año XXXVII, No. 12,120, martes 25 de julio de 1972, p. 6.
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
69
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
En primer lugar, se puede caracte-
rizar al periódico El Diario de Hoy con
un marcado interés por mantener
vigente en la opinión pública los
acontecimientos relacionados con la
Universidad de El Salvador, a través
de la publicación diaria de cuarenta
y siete notas periodísticas cortas”,
siendo monotemáticas en la mayoría
de ocasiones. A pesar de ello, fue
posible encontrar notas extensas,
de tres turnos o más, sobre todo en
acontecimientos emblemáticos que
requirieron una cobertura mayor,
como la celebración de la Asamblea
General Universitaria que desti-
tuyó al Decano Urquilla y la Junta
Directiva de la Facultad de Medicina,
así como la cobertura de los acon-
tecimientos ocurridos el 19 de julio
de 1972.
A su vez, vale la pena destacar la
publicación de diecinueve columnas
de opinión y seis caricaturas, las
cuales fueron utilizadas para hacer
mayor énfasis en el carácter anti-
comunista del discurso contra la
Universidad de El Salvador. Por otro
lado, en el caso de las columnas
de opinión, se puede distinguir la
aparición de nueve personalidades
diferentes en las publicaciones en
la sección de opinión, sobresaliendo
por el número de apariciones, así
como sus posturas marcadamente
anticomunistas, un autor de carácter
anónimo, el cual probablemente se
pueda tratar del mismo Director
del periódico, con cuatro publica-
ciones, seguido de Carlos Sandoval,
y Ricardo J. Peralta, con tres publica-
ciones cada uno.
Tabla 2.
Frecuencia de publicaciones de los articulistas que guraron en la sección de opiniones del
periódico El Diario de Hoy, durante el mes de julio de 1972.
Articulista Frecuencia
Anónimo 4
Carlos Sandoval 3
Ricardo Peralta 3
Sidney Mazzini V. 3
Alfredo Parada, hijo 2
Rafael Velásquez Mejía 1
Antonio Nájera Saravia 1
Manuel Olsen 1
Ricardo Fuentes Castellanos 1
TOTAL NOTAS DE OPINIÓN 19
Fuente: Elaboración propia
Alexis Alfredo Mejía Salazar70
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Ahora bien, el discurso particular
manejado por el autor anónimo del
periódico destaca por su acentuado
carácter anticomunista, y sugerimos
que se trata del Director del perió-
dico, debido a la crítica constante
que ejerce contra las asociaciones
estudiantiles que se deja ver entre
sus líneas, con las cuales había
sostenido un conicto desde la
década de los cincuenta
2
. A su vez,
sobresalen las columnas de Ricardo
J. Peralta por el lenguaje coloquial
utilizado en la narrativa, así como
el empleo constante de historias,
o anécdotas personales, utilizadas
para establecer comparaciones que
permitieran el fácil entendimiento
de los argumentos jurídicos detrás
del conicto universitario.
Figura 2: Caricatura que representa a la Facultad de Medicina en
la gura de un joven, pidiendo ser salvada del “totalitarismo rojo
universitario que amenaza con ahogarlo. Fuente: El Diario de Hoy,
Año XXXVII, No. 12,109, viernes 14 de julio de 1972, p. 6.
Por último, el uso de caricaturas en
la sección de opinión constituyó una
característica particular de la narra-
tiva mediática de El Diario de Hoy, y
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
71
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
fueron utilizadas en momentos de
alta tensión entre los protagonistas
de la cobertura mediática, como las
dos caricaturas publicadas en los
días posteriores a la destitución
de las autoridades de la Facultad
de Medicina, en las que se sugería
la vinculación entre la ideología
marxista y las autoridades univer-
sitarias, como principal causa de la
destitución del Decano y la Junta
Directiva; así como las tres publica-
ciones que sucedieron la interven-
ción a la Ciudad Universitaria, en
las cuales se sugería una relación
entre la Universidad y la Embajada
de la Unión Soviética en Costa Rica,
o se criticaba al Consejo Superior
Universitario Centroamericano por
querer incidir en asuntos propios del
país.
En consecuencia, la narrativa
mediática de El Diario de Hoy se
enfocó en atacar directamente a
las autoridades destituidas de la
Universidad, calicándolas como
sumisas” y oportunistas”, que traba-
jaban para satisfacer sus intereses
y los de las organizaciones comu-
nistas que las respaldaban. Criticó,
a su vez, a las organizaciones estu-
diantiles, por vivir del presupuesto
universitario y recibir salarios por
adoctrinar jóvenes de nuevo ingreso.
Por el contrario, se inclinaron a favor
de la Facultad de Medicina y sus
autoridades durante los primeros
actos, hasta asumir íntegramente el
discurso anticomunista del Gobierno
de El Salvador en el tercer acto de
la narrativa, mediante la reseña
diaria de todos los elementos que
encontraron los cuerpos de segu-
ridad pública, que sustentaban la
tesis del Presidente Molina, sobre
la presencia de comunistas en la
Ciudad Universitaria.
3.2 La Prensa Gráca: Las autoridades universitarias
como nuevas “víctimas” del comunismo
En el caso particular del perió-
dico La Prensa Gráca, vale la pena
reseñar que, con 51 publicaciones
relacionadas con la Universidad de
El Salvador, posee un interés explí-
cito por posicionar el tema de la UES
y hablar sobre los acontecimientos
que ocurrían en ella. Sin embargo, la
manera de tratarlos hace necesario
establecer ciertos matices.
En primer lugar, el equipo edito-
rial del periódico hizo un tratamiento
más esporádico del conicto interno
de la Universidad, mediante la publi-
cación de veintiséis notas periodís-
ticas, distribuidas desigualmente en
el tiempo reseñado.
Alexis Alfredo Mejía Salazar72
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Tabla 3.
Tipicación de las publicaciones relacionadas con la Universidad de El Salvador, realizadas por
el periódico La Prensa Gráca, durante el mes de julio de 1972
Tipo de publicación Frecuencia
Nota periodística 26
Artículos de opinión 2
Pronunciamientos 15
Fotografía con pie descriptivo (sin nota periodística
vinculada)
8
TOTAL LPG 51
Fuente: Elaboración propia
Al respecto, se observa la publi-
cación de una única nota esporádica
durante los primeros dos actos, usual-
mente extensa, y compuesta por tres
o más turnos, en los cuales abarcaba
todas aquellas novedades” relacio-
nadas con el conicto entre las auto-
ridades centrales de la Universidad y
la Facultad de Medicina. Ahora bien,
sobresale en el período especíco, la
construcción particular que el equipo
editorial hizo sobre el desarrollo de
los acontecimientos, en el sentido
que otorgó voz al Rector Menjívar, así
como a otros miembros del Consejo
Superior Universitario, reseñando
su opinión respecto a los aconteci-
mientos de la Facultad, mediante
el uso de un lenguaje respetuoso, y
carente de adjetivos o frases peyora-
tivas, como ocurrió en el caso de El
Diario de Hoy.
Por otra parte, los primeros dos
actos de la narrativa mediática
particular del periódico La Prensa
Gráca sobresalen por la publicación
de dieciséis comunicados, emitidos
por organismos tan variados, como
las sociedades médicas, el Colegio
Médico, la Facultad de Medicina, el
Fiscal General Universitario, las auto-
ridades de centros universitarios, y
organizaciones estudiantiles, permi-
tiendo así que, tanto a las posturas
a favor del Decano Urquilla, como
aquellas que respaldaban a las auto-
ridades centrales de la Universidad,
fueran conocidas y consideradas por
la opinión pública que consumía el
medio.
Sin embargo, el número de publi-
caciones en el periódico creció signi-
cativamente a partir del 20 de julio,
cuando el equipo editorial empe
a reportar al menos tres o cuatro
publicaciones diarias, recogiendo en
ellas los hallazgos de la Corte de
Cuentas y los cuerpos de seguridad
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
73
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
pública en las instalaciones de la
Universidad. Al respecto, el discurso
reseñado en la narrativa mediática
perdió su neutralidad característica,
y se inclinó a reproducir parcial-
mente el discurso anticomunista de
los portavoces ociales del Gobierno
de El Salvador.
Sin embargo, las críticas más
fuertes del equipo editorial fueron
dirigidas directamente a las organi-
zaciones comunistas, las cuales utili-
zaron” la Universidad como campo
de subversión”, aprovechándose de
la autonomía universitaria recono-
cida para actuar en ella con impu-
nidad. De esta forma, se distanciaron
del discurso ocial de señalamiento
directo a las autoridades destituidas
de la Universidad por los problemas
ocurridos, para dimensionarlas desde
una perspectiva más humana, como
se evidencia a través de la cobertura
a la petición de exhibición pública
hecha a favor de los ex Rectores,
Fabio Castillo y Rafael Menjívar,
así como el uso de la gura de las
esposas de los ex Rectores, como un
medio para llamar la atención de
ambos personajes, desde una faceta
más humana y familiar (La Prensa
Gráca, 27 de julio de 1972, p. 32).
Al respecto, este elemento nos
parece particularmente signica-
tivo, ya que llevó al equipo edito-
rial a distanciarse completamente
del discurso ocial, al resaltar el
aspecto humano de la expulsión
de las ex autoridades universitarias,
frente al señalamiento directo por
los problemas administrativos y de
manejo de fondos, que caracterizó a
El Diario de Hoy y el discurso hege-
mónico de la élite política.
En consecuencia, y tomando
en cuenta que La Prensa Gráca
publicó comunicados ociales de
las autoridades de la Universidad
de El Salvador, podemos sugerir que
existía una relación más cercana
entre éstas y el equipo directivo de
este periódico, ya que existe una
intención sutil por desmarcarlos
de las deciencias administrativas
descubiertas por la Corte de Cuentas
de la República.
Por último, destacan las publica-
ciones, en este período en especíco,
por el empleo constante de fotogra-
fías que acompañaban cada nota,
mediante las cuales se quiso brindar
evidencias más puntuales de la
presencia de organizaciones comu-
nistas en la Ciudad Universitaria.
En denitiva, el contexto inter-
textual particular de La Prensa
Gráca destaca por la presencia de
abundantes comunicados y pronun-
ciamientos de las partes contrin-
cantes, los cuales fueron utilizados
por el equipo editorial para “desmar-
carse” de posturas disonantes con
el discurso hegemónico, pero que
el equipo editorial tenía particular
interés en difundir. Finalmente, la
secuencia narrativa de La Prensa
Gráca destaca por su postura anti-
Alexis Alfredo Mejía Salazar74
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
comunista, pero dirigida a las organi-
zaciones de izquierdas en sí, respon-
sabilizándolas por el caos en el cual
se había sumido la Universidad,
mientras que el tratamiento otor-
gado a las autoridades universitarias
fue más permisivo, posicionándolas
como una víctima más de estas orga-
nizaciones comunistas.
4. Espacios de la secuencia narrativa sobre la
Universidad de El Salvador
Tras la revisión de las 139 publi-
caciones de los periódicos El Diario
de Hoy y La Prensa Gráca en el mes
de julio de 1972, el análisis se centró
en la identicación y delimitación de
los personajes que intervinieron, las
acciones o actos que se establecieron
entre sí, y los espacios o contextos en
los cuales se desarrollaba la narra-
tiva mediática, los cuales podían ser
físicos, como ideológicos o psicoso-
ciales (Reis y López, 1995). En ese
sentido, este capítulo se enfocará
en la delimitación y descripción de
los espacios físicos e ideológicos
que rodearon la narrativa mediática
que se construyó sobre el conicto
interno de la Universidad de El
Salvador.
Por tanto, los principales espa-
cios en los cuales se desarrolló la
narrativa mediática construida por
los periódicos El Diario de Hoy y La
Prensa Gráca fueron los siguientes:
4.1 Espacio ideológico: el anticomunismo como
ideología transversal en la narrativa
La Universidad Nacional, que ha caído en manos del Partido
Comunista de El Salvador y de otro reducido grupo de opor-
tunistas de la más denigrante inmoralidad, ha llevado sus
métodos de represión y terror a un grado tal que ha motivado
la reacción indignada de todos los profesionales decentes, que
son casi la totalidad… (Molina, en El Diario de Hoy, 20 de julio
de 1972, pp. 3, 11, 28 y 33)
La anterior cita, tomada del
discurso pronunciado por el
Presidente Molina durante la noche
del 19 de julio de 1972, y publicado
de forma íntegra al día siguiente
en ambos medios de prensa escrita,
destaca por su marcado carácter
anticomunista, ya que reconoce
abiertamente que existían organi-
zaciones de izquierdas dentro de la
UES, y que las mismas operaban en
total impunidad, ante la complicidad
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
75
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
de las autoridades. Este escenario
hacía correr el riesgo que las orga-
nizaciones de izquierda pudieran
emprender una rebelión desde el
recinto universitario, acabar con la
democracia, e impulsar un régimen
de características similares al instau-
rado por Fidel Castro en Cuba.
De esta forma, para acabar con
las probables críticas que pudiera
recibir del círculo intelectual del
país, el Presidente Molina se apre-
suró a reconocer que el calicativo
de comunistas” no era un capricho
particular, como había ocurrido en
las presidencias pasadas, si no que
respondía a la identidad propia de
estas organizaciones:
Sé muy bien que en los países latinoamericanos, ha sido una
tradición, en el pasado, el tildar de comunistas a los adversarios
de los gobiernos… Aquí, en nuestro país, no ha sido necesario,
porque los mismos dirigentes de la Universidad se han encar-
gado de declararlo abiertamente... (Molina, en El Diario de Hoy,
20 de julio de 1972, p. 11)
Ahora bien, si bien es cierto que
el discurso anticomunista consti-
tuye un eje transversal en toda la
secuencia narrativa que nos ocupa,
este aspecto del relato se acentuó
con mayor énfasis a partir de los
hallazgos que los cuerpos de segu-
ridad pública fueron reportando a los
medios de prensa escrita, a partir del
20 de julio de 1972. De esta manera,
el equipo de periodistas asoció
permanentemente los hallazgos
con la presencia de organizaciones
comunistas dentro de la Universidad,
de tal forma que la opinión pública
conociera el nivel de organización,
y la capacidad de movilización
de recursos que tenían, lo que les
hubiera permitido impulsar una rebe-
lión de grandes dimensiones, en un
período corto de tiempo: “Tal como
hemos informado y de acuerdo con
lo observado por las personas que
visitan la Universidad, la cantidad
de material subversivo encontrado
es suciente no solo para causar
problemas en El Salvador, sino que
en toda Centroamérica”. (El Diario de
Hoy, 30 de julio de 1972, pp. 3, 9).
En ese sentido, una segunda
característica del discurso antico-
munista contra la Universidad de El
Salvador radica en su carácter “inter-
nacionalista”. De esta manera, los
medios de prensa escrita hicieron ver
la capacidad de estos grupos para
establecer contactos con otras orga-
nizaciones anes en el Continente
Americano:
Alexis Alfredo Mejía Salazar76
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Documentos que atestiguan la intervención de los grupos
subversivos de El Salvador con los Tupamaros de Uruguay; la
FAR de Guatemala; Ejército Revolucionario del Pueblo, ERP,
de Argentina, y otros movimientos comunistas de América,
encontraron las autoridades en los archivos de la Universidad
Nacional. (El Diario de Hoy, 29 de julio de 1972, pp. 5, 32)
Las notas periodísticas relacio-
nadas con este tipo de hallazgos
buscaron evidenciar que existía una
coordinación entre ellas, así como
planes para impulsar operaciones
conjuntas, que hacían peligrar a toda
América Latina, cuyo refugio era,
precisamente, la Universidad de El
Salvador:
Además han sido encontradas notas de intercambio de contribu-
ciones entre los diversos movimientos. Al parecer, cuando alguno
de ellos estaba en crisis, gestionaba ayuda y por cualquier medio
se le hacía llegar. Todos los documentos están siendo sometidos
a investigación por las autoridades de Seguridad Pública. (El
Diario de Hoy, 29 de julio de 1972, pp. 5, 32)
A su vez, los medios de prensa
escrita hicieron ver el rechazo
de estas organizaciones por los
símbolos patrios, así como la auto-
ridad” representada por el Estamento
Militar y sus proezas militares, como
un medio para descalicar sus
discursos críticos contra el gobierno
de turno:
Antes de bajar al sótano ubicado en la rectoría uno de los
ociales hizo la observación de que en ningún sitio de la
Universidad, que se había visitado se encontraba la egie de los
próceres de la Independencia Nacional, señalando que habían
sido sustituidos por la egie de Carlos Marx, Lenin, Guevara,
Camilo Torres y otros dirigentes del comunismo internacional.
(La Prensa Gráca, 22 de julio de 1972, pp. 4, 54)
En tercer lugar, otro aspecto del
discurso anticomunista radicó en la
asociación constante entre las orga-
nizaciones de izquierdas que funcio-
naban dentro de la Universidad de El
Salvador y la comisión de delitos de
carácter penal, de tal forma que las
acusaciones en su contra adquirieran
un peso mayor de cara a la opinión
pública, descalicando su discurso y
sus críticas abiertas al orden esta-
blecido.
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
77
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
En ese sentido, los cuerpos de
seguridad pública reportaron el
hallazgo de al menos cincuenta
sótanos dentro de la Ciudad
Universitaria, los cuales mostraban
evidencia de haber sido utilizados
por miembros de estas organiza-
ciones para refugiarse, y para ocultar
personas privadas de libertad (El
Diario de Hoy, 26 de julio de 1972, pp. 3,
43). Por ejemplo, se señaló en ambos
periódicos, el caso del industrial
Ernesto Regalado Dueñas, secues-
trado y asesinado por miembros de
El Grupo en las inmediaciones de
la Universidad de El Salvador, razón
que fue suciente para sospechar
que ésta persona estuvo privada de
libertad en uno de los sótanos de
la Ciudad Universitaria (La Prensa
Gráca, 26 de julio de 1972, pp. 2, 19).
Por otro lado, otra nota periodís-
tica reportó el hallazgo de dos vehí-
culos abandonados bajo las gradas
de acceso al nuevo edicio de la
Facultad de Medicina en la Ciudad
Universitaria, los cuales fueron utili-
zados, presuntamente, para cometer
delitos:
Como ambos vehículos evidencia que las placas les eran
quitadas cuando así se quería, hay problemas para denir su
verdadera propiedad. Por los números de los chasís se está
investigando en Tránsito a quiénes pertenecían. La gris es la
más nueva, parece de un modelo sesenta y cinco o sesenta y
seis. Se presume que uno de estos vehículos fue el utilizado en
el asalto al Banco de Londres, en las inmediaciones de la YSU y
en otros más. (El Diario de Hoy, 26 de julio de 1972, p. 3)
En ese sentido, existe una
tendencia en el equipo de perio-
distas de ese medio impreso, en el
sentido de culpar a las autoridades
depuestas de la Universidad de El
Salvador de todas estas anoma-
lías detectadas dentro de la Ciudad
Universitaria, ya que las acusaciones
directas e indirectas formaron parte
del discurso anticomunista cons-
truido contra la Universidad de El
Salvador: “Los vehículos, según las
características, demuestran que
han estado ahí desde hace muchos
meses, razón por la que no puede
alegarse que han sido puesto en los
últimos días para hacer más graves
los cargos contra las ex-autoridades
universitarias”. (El Diario de Hoy, 26
de julio de 1972, p. 3)
Alexis Alfredo Mejía Salazar78
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Figura 3: Caricatura que ironiza la visita de los rectores del CSUCA a El
Salvador, para pedir explicaciones sobre los acontecimientos de la Universidad
de El Salvador. Fuente: El Diario de Hoy, 26 de julio de 1972, p. 6.
Además, el discurso antico-
munista tuvo la característica de
evidenciar el adoctrinamiento que
las organizaciones de izquierda
hacían con los jóvenes de nuevo
ingreso de la Universidad, para lo
cual imprimían una cantidad consi-
derable de panetos y textos de
carácter subversivo, para ser distri-
buidos entre los jóvenes, los cuales
eran evaluados posteriormente, para
conocer cómo habían comprendido
dichos textos (El Diario de Hoy, 26
de julio de 1972. p. 2). Inclusive, se
reportó que, por estas actividades,
hubo miembros de organizaciones
de izquierdas que recibieron sala-
rios mensuales, sin formar parte del
personal docente o administrativo
de la Universidad:
Había muchos casos en que se daba sueldos mensuales a
personas que no desempeñaban función docente ni administra-
tiva dentro de la Universidad. Únicamente por ser comunistas y
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
79
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
que “catequizaban” a los estudiantes de primeros años y salían
a impartir “cursillos” en las zonas marginales. (El Diario de Hoy,
25 de julio de 1972, pp. 3, 26)
Ahora bien, la secuencia narrativa
construida contra la Universidad de El
Salvador buscó evidenciar que, como
en la Alma Mater, existía la probabi-
lidad que las otras instituciones del
Estado también hubieran sido inl-
tradas por elementos subversivos,
razón por la cual existía la necesidad
de “limpiarlas”, de tal forma que la
amenaza comunista descubierta en
la Universidad de El Salvador, fuera
erradicada por completo de la vida
democrática del país: “Finalmente,
las fuentes señalaron la necesidad de
que la limpieza de comunistas debe
continuar, saneando de tales sujetos
la Corte Suprema, el Congreso, los
Ministerios, entidades autónomas y
demás ocinas gubernamentales’”.
(El Diario de Hoy, 23 de julio de 1972,
p. 28)
Finalmente, vale la pena recalcar
que el equipo editorial de El Diario
de Hoy tuvo un particular interés por
sostener y replicar el discurso antico-
munista del Gobierno de El Salvador,
criticando abiertamente a toda auto-
ridad o persona que defendiera a las
autoridades depuestas, y tildándolas
de comunistas” por igual. Un ejemplo
de este caso lo encontramos durante
la visita de los rectores miembros
del Consejo Superior Universitario
Centroamericano, quienes acudieron
a visitar al Presidente Molina, para
obtener explicaciones sobre la
intervención ocurrida el 19 de julio
de 1972. Al respecto, los editoria-
listas acusaron a los rectores de ser
cómplices” de lo que ocurría dentro
de la UES, habiendo acudido “teme-
rosos” al país, por el sólo hecho de
impedir que acciones similares se
pudieran repetir en sus respectivos
países, e inclusive:
Decimos que los rectores se han pronunciado atolondrada e
insinceramente, porque ellos sabían – o lo debían de haber
sabido- lo que pasaba en la Universidad Nacional de El Salvador,
atrapada hace ya muchos años por las camarillas comunistas
que la habían vuelto un refugio para asaltos, secuestros y
crímenes de toda clase, muy resueltas a atrincherarse allí con
alambradas, sótanos y armas. Contaban con la seguridad abso-
luta que para 1972 podrían apoderarse enteramente del país.
(El Diario de Hoy, 27 de julio de 1972, p. 7)
Alexis Alfredo Mejía Salazar80
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
De esta forma, el CSUCA fue
señalado como una organización
comunista, que colaboraba abierta-
mente con las autoridades universi-
tarias y los grupos subversivos, para
implantar un régimen comunista en
el país. En consecuencia, el periódico
se preguntó: “¿Y qué es la CSUCA,
sino una de las numerosas creaciones
inútiles de la burocracia interna-
cional, con miras funestas?”. (El Diario
de Hoy, 24 de julio de 1972. p. 7)
Inclusive, los acontecimientos
alrededor de la visita de los rectores
del CSUCA ameritaron la publica-
ción de una caricatura, en la cual,
guran dos personajes masculinos,
con gestos visiblemente molestos, los
cuales se preguntan si el embajador
ruso en Costa Rica también visitaría
el país para solicitar cuentas sobre la
“limpieza” en la UES (Ver Figura 3).
4.2 Rol de la Universidad y el principio de la
autonomía universitaria
No es difícil ver que en la situación actual del país, la Universidad
tiene la ineludible obligación de criticar intelectual y universita-
riamente la realidad nacional, tanto en sus vertientes técnicas
como en sus vertientes políticas. No solo para proponer solu-
ciones y modelos de solución, sino para contribuir a formar
una conciencia operativa que potencie o frene, según los casos,
las fuerzas operantes en torno al cambio social. Los poderes
sociales y políticos debieran ver en la crítica pública de la
Universidad un elemento indispensable del avance social y el
equilibrio social. (Ellacuría, 1999, pp. 46-47).
La anterior cita de Ellacuría,
evidencia el debate característico
sobre el rol llamado a cumplir por
las universidades, sobre todo en
el contexto latinoamericano de la
segunda mitad del siglo XX, en el
cual las universidades jugaron un
rol político crucial de resistencia y
crítica al orden establecido por los
estamentos militares. En este caso,
se esperaba que las universidades
se transformaran en entes activos
y críticos, que incidieran y transfor-
maran su realidad social. Sin embargo,
esta visión universitaria difería sobre
el papel ideal que la élite política de
la época esperaba sobre ellas, lo cual
es evidente en la cobertura mediática
sobre los acontecimientos alrededor
de la Universidad de El Salvador que
analizamos en este artículo.
Al respecto, es recurrente en las
notas periodísticas la crítica que se
hace a las organizaciones estudian-
tiles y los grupos de izquierda origi-
nados en la misma, señalados como
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
81
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
los responsables de transformarla
en un centro de adoctrinamiento
político. Esta crítica se sustenta en
la visión profesionalista” que poseen
los columnistas de ambos periódicos,
respecto al rol que la Universidad
está llamada a cumplir.
En primer lugar, la Sociedad
Médica de Oriente considera que la
Universidad ha sido transformada
en un centro de adoctrinamiento
político, alejándola de su función
fundamental, que es la “formación
de profesionales competentes para
servir a la sociedad salvadoreña”
(Sociedad Médica de Oriente, en La
Prensa Gráca, 18 de julio de 1972,
p. 44). Por otra parte, los diputados
entrevistados coincidieron en señalar,
durante la sesión en la cual fueron
destituidos el Rector y miembros
del Consejo Superior Universitario,
que el grupo dominante comu-
nista” llevó a la Universidad a un
punto en el cual no cumplía con
la función social mencionada en la
Constitución. Al contrario, se tornó
en un instrumento de control polí-
tico de unos cuantos elementos, en
la búsqueda de satisfacción de sus
personales apetitos” (El Diario de Hoy,
20 de julio de 1972, pp. 3, 17).
Visión similar tenía el Presidente
Molina, quien, en su discurso de
la noche del 19 de julio, pidió a
los padres de familia y estudiantes
universitarios, la paciencia necesaria
para erigir una nueva universidad, al
servicio del país, de su desarrollo, y
de las futuras generaciones:
A los padres de familia les solicito su comprensiva paciencia,
durante este corto período de cierre de la Universidad. A los
estudiantes universitarios, les demanda un gran sentido de
responsabilidad social, conjuntamente con un alto criterio
democrático, para el establecimiento de una Universidad que
responda a las exigencias de un pueblo que reclama lo mejor de
sus jóvenes para lograr su desarrollo social y económico, en esta
etapa decisiva para el destino de nuestro país, para nuestros
hijos y para los hijos de nuestros hijos. (Molina, en El Diario de
Hoy, 20 de julio de 1972, p. 33)
Sobre la función social a la que
está llamada la Universidad, Carlos
Sandoval (en El Diario de Hoy, 14
de julio de 1972, pp. 6, 26) escribió
una columna de opinión, en la cual
analizó el principio de la auto-
nomía universitaria como elemento
fundamental para garantizar que la
Alma Mater pueda cumplir con su
rol de transformación social. Antes
del reconocimiento de dicho prin-
cipio, el Poder Ejecutivo nombraba
a las autoridades universitarias a su
conveniencia, primando intereses
políticos frente a los eminentemente
universitarios. Sin embargo, las orga-
Alexis Alfredo Mejía Salazar82
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
nizaciones estudiantiles transfor-
maron esa realidad, y obtuvieron el
reconocimiento ejecutivo de la auto-
nomía en julio de 1944, y raticada
a través de la Constitución del año
1950.
Ahora bien, en un ejercicio revi-
sionista, Sandoval recuerda aque-
llas injerencias del Ejecutivo sobre
la Universidad, que justicaron el
reconocimiento de la autonomía
universitaria en la década de los
cuarenta, para establecer un paralelo
con el contexto presente, en el cual
los comandos estudiantiles” han
utilizado este principio para trans-
formar en “feudo a la Universidad,
utilizándola como “instrumento
de agitación política y cuartel de
subversión” (Sandoval, en El Diario de
Hoy, 14 de julio de 1972, pp. 6, 26).
Por tanto, Sandoval considera que la
autonomía sigue siendo un principio
válido, pero debe ser orientado hacia
el cumplimiento de la misión de la
Universidad, no hacia el cumpli-
miento de intereses políticos:
No quiero decir con ello que la Universidad debe permanecer
ajena a los problemas sociales y políticos de la época. Todo
lo contrario. Las Universidades deben ser, fundamentalmente,
laboratorios de cambio, de búsqueda incesante de nuevas ideas,
de renovación continua del pensamiento y esfuerzo incansable
por dignicar al hombre. Pero de esto, a quererlas convertir
en cuarteles de doctrinas políticas sectarias y dogmáticas, hay
mucha diferencia. (Sandoval, en El Diario de Hoy, 14 de julio
de 1972. pp. 6, 26)
De la misma manera, el Presidente
Molina aduce el “falseamiento del
concepto de autonomía universitaria
por parte de las organizaciones de
izquierdas y las autoridades univer-
sitarias, en el sentido que crearon un
Estado dentro de otro Estado, como
un medio para defender e impulsar
sus intereses políticos particulares:
Para todo ello, la camarilla universitaria ha querido falsear, deli-
beradamente, el concepto de la autonomía, tratando de convertir
a la Universidad en un Estado dentro de otro Estado. Lo que
atenta contra los principios más elementales de la soberanía
nacional, con el objeto de realizar impunemente sus maquina-
ciones contra el sistema institucional y a n de que no fuesen
descubiertas sus deshonestidades administrativas. (Molina, en
El Diario de Hoy, 20 de julio de 1972, p. 11)
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
83
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
En consonancia con el discurso
del Presidente Molina, el equipo
editorial de El Diario de Hoy publicó
una columna, en la cual critica las
gestiones de los últimos 20 años
al frente de la Universidad de El
Salvador, asegurando que han vivido
al margen de la Ley, escudadas en la
autonomía universitaria obtenida en
1944:
Porque precisamente durante los últimos 20 años, la Universidad
Nacional, usando y abusando de un concepto de autonomía
reñido con las más elementales nociones de derecho constitu-
cional y administrativo, se ha mantenido casi ininterrumpida-
mente todo el tiempo, a espaldas de la ley, desaando a la Corte
de Cuentas. (El Diario de Hoy, 25 de julio de 1972, p. 7)
Por último, y tras la intervención
de la Universidad de El Salvador por
parte de los cuerpos de seguridad
pública, Alfredo Parada hace una
reexión sobre los últimos acon-
tecimientos ocurridos, mediante la
cual hace un revisionismo de las
anteriores gestiones al frente del
Ejecutivo, a quienes responsabiliza
de haber permitido el ascenso de
las organizaciones de izquierda en
los asuntos universitarios. En ese
sentido, aun cuando fue recono-
cido por un conglomerado de dipu-
tados en el seno de una Asamblea
Constituyente, el principio de auto-
nomía es fuertemente criticado por
Parada, y lo justica de la siguiente
manera:
Pero las normas legales no deben promulgarse a contrapelo
de la realidad. Entonces, nos encontramos con una tontería y
con una picardía en la pretensión de erigir a una entidad en
autónoma, cuando no puede serlo ya que tiene necesidad de ser
mantenida por el Gobierno. (Parada, en El Diario de Hoy, 29 de
julio de 1972, pp. 9, 27)
De esta manera, y ante la nueva
realidad, el columnista llama a
acabar con ese pasado, y construir
una nueva universidad, apegada al
principio de autonomía universitaria,
y lejos del criterio comunista” que
lo caracterizó desde la década de
los cincuenta: “Debe terminarse para
siempre con el criterio comunista de
que la autonomía signica un estado
frente al Estado de El Salvador”.
(Parada, en El Diario de Hoy, 24 de
julio de 1972, pp. 7, 22)
Alexis Alfredo Mejía Salazar84
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
4.3 Revisionismo histórico del autoritarismo
militar en El Salvador
Abonando al espacio ideoló-
gico anticomunista presente en la
narrativa mediática que nos ocupa,
resulta importante destacar el
carácter revisionista del discurso,
en el sentido que los columnistas y
equipo editorial aplauden la rápida
acción emprendida por el Ejecutivo
salvadoreño presidido por Molina,
mientras ejercieron una labor abier-
tamente crítica contra los gobiernos
antecesores, sobre todo a partir del
gobierno de Óscar Osorio, en 1950.
Al respecto, destaca la columna
de opinión publicada por Alfredo
Parada, en la cual hace una revisión
histórica del principio de autonomía
universitaria, y su reconocimiento
formal en la Constitución promul-
gada en el año 1950. De esta manera,
el columnista solicita que en la
nueva Ley Orgánica de la “Nueva
Universidad de El Salvador”, cuyas
bases fueron sentadas el 19 de julio
de 1972, sea interpretado de forma
correcta, el principio de autonomía
universitaria reconocido en el ar-
culo 204 de la Constitución vigente,
con miras a mantener el orden en el
conglomerado (El Diario de Hoy, 29
de julio de 1972: 9, 27). Sin embargo,
es evidente que el columnista no
mira con buenos ojos el reconoci-
miento de la autonomía a la UES,
puesto que descalica la acción
como una estrategia complaciente”
del Presidente Osorio (1950-1956)
con los comunistas, con miras hacia
su contención:
Este precepto fue una invención de “juristas” de la administración
de Oscar Osorio, gobernante que trató de amarrar el convivio de
comunistas a la salvadoreña y de todo tipo de enemigos de
la Fuerza Armada con la misma institución castrense. Osorio
procedió así presionado por antimilitaristas, con la esperanza
de mantener complacidos a los comunistas haciéndoles entrega
de un feudo, la Universidad, en donde tuviesen asegurada su
pitanza y demás prebendas que los sucesivos grupos de profe-
sionales sin clientela se han asegurado en la Casa de Estudios.
(Parada, en El Diario de Hoy, 29 de julio de 1972, pp. 9, 27)
En ese sentido: “También, por
respeto a nosotros mismos, los
salvadoreños, debemos creer, aunque
no sea así, en la juridicidad de ese
precepto, y tratar de darle una inter-
pretación, en el proyecto de esta-
tuto universitario, de acuerdo a la
realidad vivida”. (Parada, en El Diario
de Hoy, 29 de julio de 1972, pp. 9, 27)
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
85
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Sin embargo, fue el Presidente
Fidel Sánchez Hernández (1967-
1972) el que recibió la mayor
cantidad de críticas por su pasividad
ante el problema de la Universidad.
Al respecto, el mismo Parada
aduce la escasa visión política” del
entonces Presidente, al permitir que
los comunistas se envalentonaran”
en la Universidad. Para ello:
Sánchez aparentemente creyó que el dejar hacer y el atender
todo tipo de exigencias presupuestarias de parte de aquellas
autoridades, le garantizaban éxito bueno en sus gestiones
administrativas con el resultado de tener quietos a los comu-
nistas detentadores de la Universidad. (Parada, en El Diario de
Hoy, 24 de julio de 1972, pp. 7, 22)
Inclusive, llegó a dudar de las cualidades democráticas del entonces
Presidente, en el sentido que:
Sánchez se mostró siempre dispuesto a coquetear con los
comunistas, aun desde cuando era Ministro del Interior. Esta
concepción izquierdista del ex-mandatario –de un izquierdismo
ramplón, difuso, demagógico-, explica la no disimulada simpatía
que le inspiraron a Sánchez los comunistas a lo largo de su
período. (Parada, en El Diario de Hoy, 24 de julio de 1972, pp.
7, 22)
A pesar de ello, no culpa del todo
al ex-Presidente Sánchez Hernández,
puesto que heredó la situación polí-
tica del antecesor en el cargo, Julio
Adalberto Rivera, sin embargo:
(...) éste supo entenderse un tanto mejor con los disociadores
universitarios, porque, a decir verdad, se identicó con ellos
desde cuando era ocial de grado inferior. De tal manera que
Rivera le hizo frente al problema universitario, sin encontrarle
solución de continuidad, pero le hizo frente a su modo, a la
garduña universitaria. (Parada, en El Diario de Hoy, 24 de julio
de 1972, pp. 7, 22)
Finalmente, la idea de la pasividad
de Sánchez Hernández para enfrentar
el comunismo en la Universidad de
El Salvador fue replicada por Ricardo
Peralta, quien culminó su columna
de opinión, preguntándose por qué
el ex-Presidente no procedió de la
misma forma que Molina, siendo una
Alexis Alfredo Mejía Salazar86
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
de las interrogantes que no poseen
respuesta, vaya usted a saber por
qué” (Peralta, en El Diario de Hoy, 28
de julio de 1972, pp. 6, 19).
4.4 Espacios institucionales: la Universidad de El
Salvador y la Política de Puertas Abiertas
Por último, merece la pena señalar
el espacio interno de la Universidad
de El Salvador, el cual estuvo deter-
minado por el debate nacional sobre
la ampliación en la cobertura de los
servicios públicos, ocasionada por la
necesidad de absorber el incremento
exponencial de población bachi-
ller, acaecido a partir de la década
de los cincuenta del Siglo XX. De
esta manera, la Universidad de El
Salvador también debatió sobre la
forma ideal de recibir esta cantidad
mayor de estudiantes graduados del
bachillerato, sin que dicha inserción
representara una dicultad, dados
los recursos con los que contaba la
institución.
Como primer elemento, vale
la pena recordar el discurso del
Presidente Molina de la noche del 19
de julio, en el cual abundan los cali-
cativos e insinuaciones realizadas
sobre el presupuesto universitario,
el cual considera creciente”, motivo
suciente para generar codicia de
parte de las autoridades universita-
rias para repartirse ese “botín”, prote-
gido de cualquier auditoría de la
Corte de Cuentas, gracias a la auto-
nomía que gozaba la Universidad:
Pero los objetivos internacionales de estos malos salvadoreños,
vinieron a ligarse a la más abyecta corrupción, para repartirse,
como un botín, un presupuesto cada vez más creciente, que ha
llegado a sumar decenas de millones de colones, con lo que se
concretizaba la tremenda paradoja de que el pueblo salvado-
reño estuviera nanciando las actividades subversivas o satisfa-
ciendo los apetitos personales de aquellos que trabajamos, día y
noche, para lograr la misma destrucción de ese pueblo y de sus
instituciones democráticas. (Molina, en El Diario de Hoy, 20 de
julio de 1972, p. 11)
Esta observación del presupuesto
creciente por parte del Presidente
Molina obedece al crecimiento expo-
nencial de los fondos asignados a la
Universidad que se observó durante
el rectorado de Fabio Castillo,
período en el cual se implementó la
reforma universitaria (Campos, 2011),
representando cambios cruciales a
nivel económico y social, y que deci-
didamente impactaron al ámbito
interno universitario.
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
87
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
A su vez, merece especial consi-
deración el crecimiento poblacional
característico de la segunda mitad
del siglo XX, lo cual obligó a la
Universidad a implementar reformas,
que le permitieran absorber la mayor
cantidad de estudiantes graduados
del bachillerato. Finalmente, fue
durante el rectorado de Rafael
Menjívar que se adoptó la llamada
política de puertas abiertas”, permi-
tiendo el ingreso libre de todo aquel
estudiante inscrito, sin necesidad de
someterse a un examen de admi-
sión, origen del conicto interno que
derivó en la intervención del Estado
en julio de 1972.
En ese sentido, los debates
ocurridos entre defensores y detrac-
tores de la Política de Puertas
Abiertas de Menjívar marcaron los
espacios sobre los cuales se desa-
rrollaron los primeros actos de la
secuencia narrativa que nos ocupa,
siendo la Facultad de Medicina, una
de las detractoras más sonadas de la
adopción de la “Política de Puertas
Abiertas”, ya que las autoridades de
dicha Facultad consideraron que la
admisión indiscriminada de estu-
diantes signicaría una disminución
en la calidad de la formación de
los futuros médicos que se estaban
entregando al país. De esta manera,
el Doctor Emérito Luis Edmundo
Vásquez, a quien fue nominada la
Facultad de Medicina escindida
de la Universidad, fue uno de los
detractores de esta política impul-
sada por las autoridades de la UES,
al asegurar que: “Pretender sacar
buenos médicos con cupos ilimi-
tados, es el engaño más grande que
puede haber, que se lo tragan solo
las masas, ignorantes del todo de
cómo se forma un médico. (Vásquez,
en La Prensa Gráca, 8 de julio de
1972. pp. 5, 22, 35)
Por otro lado, y en sintonía con
el debate nacional de ampliación de
los servicios públicos a la población,
la Facultad de Medicina, junto con el
gremio médico del país, sostuvieron
que pesaba más la formación de
médicos de calidad, que la admi-
sión indiscriminada de estudiantes
que, eventualmente, desertarían de
sus estudios superiores: “Que con la
política “de puertas abiertas” no se
consigue más que pérdida de tiempo
y recursos en general, puesto que a la
larga solo un 40% de los ingresados
llegan a graduarse”. (Gremio Médico
de Santiago de María, en La Prensa
Gráca, 18 de julio de 1972, p. 50)
Por tanto:
El problema de Salud del país no es más que uno de los tantos
que agobian a nuestro pueblo y que por lo tanto, la pronta solu-
ción de los mismos no es la promoción de grandes cantidades
de “parcheros” sino que demanda profundas reformas econó-
Alexis Alfredo Mejía Salazar88
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
micas, sociales y políticas dentro de las que médicos sucientes
en calidad y cantidad son una parte de ellas. (Cuerpo de Médicos
del Hospital de Maternidad, en La Prensa Gráca, 17 de julio
de 1972, p. 64)
De esta forma, se observa que el
contexto nacional fue determinante
en el desarrollo de los discursos de
las partes antagónicas dentro de la
Universidad de El Salvador. Como
centro de estudios superiores, la
UES no debía únicamente formar
profesionales per sé, si no que debía
incidir, a través de estos nuevos
profesionales, en la solución de los
problemas nacionales del momento.
En ese sentido, las autoridades
de Medicina consideraron impor-
tante la implementación de un
reglamento de servicios sociales
para lograr que los estudiantes
pudieran realizar sus prácticas en el
interior del país, tomando en cuenta
que el número de médicos en esas
áreas era signicativamente menor.
Sin embargo, los roces y disputas
con los grupos de izquierda dentro
de la Universidad fueron determi-
nantes en los discursos ociales de
la Facultad de Medicina, quien acusó
a los comandos” de velar por sus
intereses particulares, frenando con
ello las verdaderas soluciones a los
problemas de país:
Saben que la producción de más médicos por sí sola no resul-
taría en benecio para el pueblo si no se toman medidas simul-
táneas para corregir su actual distribución en el país asegurando
que todas las comunidades y no sólo San Salvador, cuenten
con médicos permanentemente, pero no se atreven a hacer un
reglamento del Servicio Social que seguramente será impopular
con los vociferantes miembros del “Comando, quienes evidente-
mente solo desean privilegios y regalías de calicaciones y no
aceptarán acciones que de veras los obligue a trabajar por el
pueblo que tan demagógicamente dicen representar. (Ocina de
Relaciones Públicas de la Facultad de Medicina, en La Prensa
Gráca, 3 de julio de 1972, p. 44)
Sin embargo, hubo voces a favor
de la Política de Puertas Abiertas.
Por ejemplo, las autoridades del
Centro Universitario de Occidente
emitieron un pronunciamiento de
condena abierta a las autoridades de
Medicina y los grupos de estudiantes
y docentes que los apoyaban, por
conservar sus intereses y negarse
a cumplir los acuerdos” del Consejo
Superior Universitario. A su vez,
pidieron la destitución de las auto-
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
89
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
ridades de Medicina, por haber inci-
dido en que la Facultad produzca un
tipo de profesional con una defor-
mación social y no como servidor
del pueblo salvadoreño, aunado al
compromiso que la misma tiene
con los Estados Unidos, país que es
el encargado de piratear” profesio-
nales en todo el mundo (Consejo
Directivo del Centro Universitario de
Occidente, en La Prensa Gráca, 4 de
julio de 1972, p. 38).
Inclusive, hubo organizaciones
dentro de la Facultad de Medicina
que sí apoyaron la Política de
Puertas Abiertas. Por ejemplo,
el Departamento de Medicina
Preventiva y Salud Pública de la
Facultad de Medicina emitió un
pronunciamiento de condena al
grupito del Decano Urquilla, por
impedir el ingreso de los nuevos
estudiantes, a pesar que sí se podrían
recibir, de acuerdo con sus cálculos,
si se lleva a cabo una reestructu-
ración de la Facultad: y no solo
podemos, sino que debemos reci-
birlos” (Departamento de Medicina
Preventiva y Salud Pública, en La
Prensa Gráca, 4 de julio de 1972, p.
45).
Finalmente, y tras “haber agotado
su paciencia”, el Consejo Superior
Universitario solicitó a la Asamblea
General Universitaria, la destitución
del Decano Urquilla y los miembros
de la Junta Directiva (Arévalo, en
LPG, 5 de julio de 1972, p. 30). De
esta manera, los acontecimientos se
trasladan hacia una entidad institu-
cionalizada, responsable de la toma
de decisiones estratégicas dentro de
la Universidad de El Salvador.
Al respecto, predomina una
imagen negativa de este tipo de orga-
nismos colegiados, en el sentido que
los defensores del Decano Urquilla
llegaron a comparar la sesión de la
Asamblea General Universitaria con
los procedimientos utilizados en
la Asamblea Legislativa, cuando se
votan paquetes de leyes sorpresivas
y demagógicas”. Por tanto, la sesión
que destituyó a las autoridades de
Medicina fue calicada como de
“juicio sumarísimo, y se caracte-
rizó por contar con “intervenciones
prefabricadas que apenas permi-
tieron una mínima participación al
Decano Urquilla y a sus defensores”,
culminando en un procedimiento
amañado, del cual se conocía el
resultado de antemano (El Diario de
Hoy, 7 de julio de 1972, pp. 3, 47).
De esta manera, la atención se
traslada nuevamente hacia la Política
de Puertas Abiertas”, al ser cali-
cada por las organizaciones estu-
diantiles anes al Decano Urquilla
como el origen del problema de la
Facultad de Medicina”, y fue utili-
zada como bandera de lucha por
estas organizaciones, a la hora de
cabildear los apoyos políticos en el
Gobierno, Asamblea Legislativa, y
gremio médico al interior del país,
que tendieran hacia la separación
de la Facultad del conjunto de la
Alexis Alfredo Mejía Salazar90
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Universidad (La Prensa Gráca, 8 de
julio de 1972, pp. 5, 36).
Al respecto, sobre la atención
hacia la Política de Puertas Abiertas,
vale la pena revisar la reconstruc-
ción que los periodistas hacen sobre
las asambleas estudiantiles que se
desarrollaron después de la destitu-
ción del Decano, en el sentido que
intentan demostrar unidad alrededor
de la Política, como el origen de los
problemas de la UES, razón por la
cual tomaron la decisión de separar
por su cuenta la Facultad, y buscar
los apoyos que permitieran ocia-
lizar el movimiento: “Los aplausos
de los alumnos asistentes expre-
saron el sentir general en contra de
la demagogia del Consejo Superior
Universitario al propugnar la política
de puertas abiertas’ a la Facultad
para el ingreso de nuevos alumnos.
(El Diario de Hoy, 8 de julio de 1972,
pp. 4, 17)
Finalmente, los estudiantes de
Administración de Empresas hicieron
una petición similar de separación
de la Escuela en la cual estudiaban,
respecto a la Universidad de El
Salvador. De esta forma, los estu-
diantes declararon que no había más
camino que separarse de la UES,
siguiendo los mismos pasos que
Medicina hiciera unos días atrás:
“En n, dijeron, solo les queda sepa-
rarse de la Universidad, urgencia que
se impone ante la supresión de la
libertad de expresión y de acción en
la otrora Universidad . (El Diario de
Hoy, 12 de julio de 1972, p. 3)
Si bien la atención recibida
respecto al caso de Administración
de Empresas no se acercó a la del
caso de Medicina, destaca por el
hecho de mostrar la división exis-
tente entre los integrantes de la
Universidad, evidenciando una crisis
que no pudo ser solucionada por sus
propios canales institucionales. Al
respecto, Carlos Sandoval sostuvo
que los problemas universitarios
debían ser solucionados dentro de
la misma Universidad, rechazando
cualquier comentario o publicación
que llevara a culpabilizar a terceros
de los problemas universitarios.
Está claro, pues, que el problema de la Universidad no proviene
de ninguna fuerza extraña, sino que surge dentro de ella misma.
Tratar de inculpar a otros, es padecer la manía de los enfermos
de mente primitiva que achacan sus dolencias a la “magia
negra”. (Sandoval, en El Diario de Hoy, 12 de julio de 1972, pp.
6, 25)
De igual manera, rechaza cual-
quier intervención probable que
las fuerzas de seguridad pública
pudieran hacer a la Universidad,
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
91
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
en el sentido que es el principio
de autonomía el que garantiza que
los problemas universitarios sean
resueltos única y exclusivamente por
los universitarios mismos:
Con ello no quiero decir, ni siquiera insinuar como ya lo ha
hecho más de algún articulista, que la solución del problema
esté en la intervención policial... Los problemas universitarios
deben ser resueltos por los propios universitarios. (Sandoval, en
El Diario de Hoy, 12 de julio de 1972, pp. 6, 25)
5. Conclusiones
Aquí, en nuestro país, no ha sido necesario, porque los mismos
dirigentes de la universidad, se han encargado de declararlo
abiertamente (llamarse “comunistas”), y me concretaré a recordar
unos pocos de los muchos ejemplos. (Molina, en El Diario de
Hoy, 20 de julio de 1972, p. 11)
Con esta frase, iniciaba el
Presidente Molina la revisión de todos
aquellos elementos que, a su juicio,
evidenciaban el nexo existente entre
las autoridades de la Universidad de
El Salvador, y las organizaciones de
izquierdas presentes en el país y el
resto del mundo. Y para corroborarlo,
citó reiteradamente las noticias que
“todos hemos leído en los periódicos.
Posteriormente, entre el 20 y el 31 de
julio de 1972, la cobertura de ambos
periódicos empezaba a demos-
trar lo que el Presidente Molina
había pronunciado en su discurso,
es decir, se encontró evidencia de
uso discrecional e indiscriminado
de los fondos universitarios para la
impresión de panetos propagandís-
ticos, manuales de guerrillas y para
el nanciamiento de la estadía de
estudiantes en países comunistas;
el irrespeto a los símbolos patrios.
Inclusive, los medios revisados
ayudaron a fortalecer las acusa-
ciones del Presidente, al reportar
nuevos hallazgos y evidencias.
De esta manera, es evidente el
vínculo estrecho que existió entre
la élite política y la élite mediática,
en el sentido que la prensa ayudó a
reproducir el discurso anticomunista
del gobierno, y en ocasiones, sirvió
para sustentarlo y darle sentido.
Para lograrlo, los equipos edito-
riales de los periódicos El Diario de
Hoy y La Prensa Gráca se valieron
del uso del género narrativo y del
discurso anticomunista del Gobierno
de El Salvador, para aprovechar el
conicto interno entre la Facultad
de Medicina y el Consejo Superior
Alexis Alfredo Mejía Salazar92
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
Universitario, y desacreditar con
dicha narrativa, el trabajo eminente-
mente crítico de una institución que
cuestionó abiertamente el orden
establecido por los militares en El
Salvador, durante la segunda mitad
del Siglo XX.
A pesar de dicha intenciona-
lidad, vale la pena señalar algunos
matices en la forma que los medios
reprodujeron su narrativa: El Diario
de Hoy mostró ser más agresivo y
sistemático con sus publicaciones,
buscando mantener vigente la temá-
tica de la Universidad de El Salvador
en la opinión pública. Señaló abier-
tamente a las autoridades univer-
sitarias como las responsables del
problema” de la Universidad, victi-
mizó a los jóvenes estudiantes a
través del personaje de la Facultad
de Medicina, y colocó al Presidente
Molina como el “héroe” que detuvo
las intenciones subversivas que se
refugiaban tras la autonomía de la
UES. Por último, destaca el uso de
columnas de opinión y caricaturas,
con las cuales buscó puntualizar sus
aspectos críticos, y acercarlos más a
la opinión pública.
Por su parte, La Prensa Gráca
mostró ser más cauteloso con su
cobertura, eximiendo a las autori-
dades universitarias de cualquier
responsabilidad directa sobre la
“amenaza roja” presente en la
Universidad, mostrándolos como
“víctimas” de las organizaciones de
izquierdas. A su vez, destaca por
haber brindado voz a las autoridades
universitarias durante el desarrollo
del conicto interno universitario,
lo cual permitió conocer ambas
versiones, para que la opinión
pública pudiera generar su propio
análisis sobre ambas posturas.
La narrativa construida por
ambos periódicos transita sobre tres
espacios comunes fundamentales, a
saber: el anticomunismo como eje
transversal de la narrativa, la idea de
la universidad como institución y su
rol a nivel nacional, y el revisionismo
histórico de los gobiernos militares
de El Salvador.
En primer lugar, la revisión de las
notas periodísticas evidencia que
la narrativa construida por ambos
equipos editoriales, se valió del
discurso anticomunista del Gobierno
para hacer lectura de los aconteci-
mientos ocurridos en la Universidad
de El Salvador, previo y posterior al
19 de julio. De esta manera, todos
los personajes y todas sus acciones,
obedecían a las intenciones comu-
nistas de dominación de la institu-
cionalidad del país y su desarrollo,
valiéndose de la errada interpreta-
ción de la autonomía universitaria
que les permitió convertir a la UES
en un bastión clandestino, desde el
cual impulsar la dominación sobre
Centroamérica. Sin embargo, la
pronta y oportuna intervención del
Presidente Molina permitió frenar
dichas intenciones, y la cobertura
realizada los días posteriores al 19
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
93
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
de julio, persiguió el objetivo de
demostrar los alcances y las capa-
cidades de estas organizaciones
subversivas, para impedir que la
nueva Universidad” fuera a cometer
los mismos errores que la anterior.
En segundo lugar, el rol de la
universidad fue ampliamente deba-
tido y cuestionado, en el sentido que
la llamada autonomía universitaria”
había servido única y exclusivamente
como excusa para que las organi-
zaciones de izquierda la utilizaran
como bastión para impulsar sus
ideas subversivas. Contrario a esto, la
narrativa debatió sobre la necesidad
de una universidad profesionista”, es
decir, que formara los profesionales
necesarios para conseguir el desa-
rrollo y el progreso del país, de su
industria y de sus potencialidades
económicas. Ahora bien, existieron
opiniones encontradas respecto a
la ampliación de las aulas universi-
tarias, ya que hubo sectores que se
negaron a permitir dicha apertura,
si ello implicaba una desmejora en
la calidad de la formación de estos
profesionales que necesitaba el
país, lo cual sirvió para cuestionar
la Política de Puertas Abiertas”de
Menjívar, y calicarla como una
medida “demagógica” y sin sentido
práctico.
Por último, la narrativa construida
por los equipos editoriales busca los
orígenes del problema” de la UES,
llevándolos a responsabilizar a los
anteriores gobiernos militares, por la
pasividad y permisividad con la cual
actuaron respecto a la Universidad y
las organizaciones de izquierdas en
su interior. De esta manera, respon-
sabilizaron al Gobierno de Óscar
Osorio (1950 - 1956) por introducir
el concepto de autonomía universi-
taria en la Constitución aprobada en
1950, y por permitir que las organi-
zaciones de izquierdas interpretaran
el concepto a su mejor conveniencia.
Sin embargo, fue el gobierno de Fidel
Sánchez Hernández, antecesor de
Molina, el que se llevó las principales
críticas, coincidiendo con el fortale-
cimiento institucional vinculado con
la reforma universitaria del Rector
Fabio Castillo, que llevó a la cons-
trucción de la Ciudad Universitaria,
y el crecimiento gradual del presu-
puesto asignado a la Alma Máter.
De esta manera, y valiéndonos de
uno de los posibles escenarios de
las interacciones entre los compo-
nentes que integran el sistema de
comunicación política de Blumler
y Gurevitch (1995), podemos inferir
que, el caso particular de la cober-
tura a los acontecimientos de la
Universidad de El Salvador en julio
de 1972, demuestra la sumisión de la
élite mediática frente a la élite polí-
tica, la cual impuso el discurso anti-
comunista como método de análisis
para toda aquella gura que no coin-
cidiera con su manera de concebir el
orden establecido nacional. Sin lugar
a dudas, fue el Presidente Arturo
Armando Molina el principal favo-
recido, ya que la narrativa mediática
Alexis Alfredo Mejía Salazar94
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
construida por los medios de prensa
escrita, persiguió, tácitamente, forta-
lecer su imagen de cara a la opinión
pública, fuertemente cuestionada
tras las acusaciones de fraude que
rodearon su proceso de elección.
Curiosamente, la lectura que
nos aporta el escenario de Blumler
y Gurevitch (1995), también nos
permite una nueva forma de
comprender el escenario de polari-
zación política característico de la
década de los setentas del Siglo XX
salvadoreño, en el cual se estaban
consolidando las fuerzas que prota-
gonizarían la Guerra Civil unos años
después.
Referencias bibliográcas:
Blumler, J. y Gurevitch, M. (1995). “Linkages Between the Mass Media and
Politics”. En Blumler, J. (Ed.). The Crisis Of Public Communication, pp. 11 24.
Routledge.
Campos, A.M. (2011). “170 años de limitaciones económicas”. El Universitario,
XIII, (17), pp. 24 27.
Corte Suprema de Justicia (1972). Sentencia de inconstituciona-
lidad contra el Estatuto Orgánico de la Universidad de El Salvador.
Recuperado de http://www.jurisprudencia.gob.sv/DocumentosBove
da/D/1/1970-1979/1972/07/89326.PDF
Diario Ocial, tomo 236, No. 133, martes 18 de julio de 1972, p. 6617-6625.
Diario Ocial, tomo 236, No. 134, miércoles 19 de julio de 1972, p. 6631.
Ellacuría, I. (1999). Escritos universitarios. UCA Editores.
Reis, C. y Lopes, A. C. (1995). Diccionario de narratología. Ediciones Colegio
de España.
Notas
1. Este artículo tiene, como punto de origen,
la tesis presentada en el mes de octubre
de 2017 a la Facultad de Postgrados de
la Universidad Centroamericana “José
Simeón Cañas”, que lleva por título
Aún hay tiempo, pero no mucho tiempo:
Análisis del discurso anticomunista que
se construyó sobre la Universidad de El
Salvador, desde los medios de prensa
escrita de circulación nacional, durante el
mes de julio de 1972, en la cual se revi-
saron un total de 139 publicaciones de
los periódicos El Diario de Hoy y La Prensa
Gráca, relacionadas con la cobertura
de los acontecimientos alrededor de la
Universidad de El Salvador.
2. El mencionado conicto del director del
periódico El Diario de Hoy, Napoleón Viera
Altamirano, con la Asociación General de
Estudiantes Universitarios Salvadoreños
Acercamiento a los espacios de debate en la cobertura de la prensa escrita sobre la
Universidad de El Salvador, durante el mes de julio de 1972
95
Revista Realidad 158, 2021
ISSN 1991-3516 – e-ISSN 2520-0526
(AGEUS) se hace palpable en las publi-
caciones que aparecieron en el periódico
de la AGEUS. Sirva de ejemplo el artículo
“Las más denigrantes faltas a la ética
periodística que conocerá El Salvador”,
en Opinión Estudiantil, época XVIII, No.
4, 23 de enero de 1965, p. 1.